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Consejos para comer más saludable y gastar menos dinero

¿Saludable y barato pueden ir de la mano? ¡Sí! Comer saludable o vegano no significa que debas gastar más dinero. Aunque los sustitutos de carne son a menudo más caros que los trozos baratos de tocino o pollo de granja. También una botella de cola sigue siendo más barata que un batido fresco, y por una bolsa de frutas secas o frescas pagas más que por una bolsa de dulces. ¡Lo sabemos! Así que primero un recordatorio:

Tus células están hechas de lo que comes. ¿Comida rápida barata, pero quieres mantenerte joven y hermoso por más tiempo? Es una combinación peculiar, ¿verdad? Aquí viene la buena noticia; comer más barato también significa a menudo automáticamente cocinar más simple, comidas más saludables y menos desperdicio (menos plástico). ¿Cómo? Hemos reunido los 10 mejores consejos económicos para ti. Probados y confirmados.


1. Compra al por mayor

La base de tus platos y de donde obtienes tus calorías es (¡hurra!) vegana, barata y saludable. Papas, arroz, frijoles, avena, granos. Cuanto menos procesados, más baratos. Así que frijoles secos en lugar de enlatados. Arroz simple en lugar de pasta de lentejas elegante. Puedes guardar estos ingredientes por mucho tiempo y cuando los compras a granel son aún más baratos.

¡Esto se aplica también a los ingredientes frescos! Cuando vas a recoger manzanas a una granja o preguntas en supermercados locales, mercados o verdulerías por una gran cantidad, a menudo recibes un buen descuento. Luego puedes congelar esos ingredientes. ¡Ganar ganar!


2. Supermercado vs supermercado

¿Dónde haces tus compras? ¿Eres un cazador de ofertas o vas directamente al supermercado más cercano porque ahí tienen todo? Hay una diferencia en dónde haces tus compras. En un supermercado económico tal vez haya menos opciones, pero la sección de frutas y verduras frescas suele ser muy buena. En el supermercado turco de la esquina también pagas mucho menos que en tiendas (biológicas) caras o en las grandes cadenas de supermercados. Y si vives cerca de muchas granjas, pásate por allí. A menudo puedes llevarte ingredientes frescos a un precio muy bajo.

Ve al mercado al final del día. A menudo puedes conseguir ingredientes frescos a precio reducido.


3. Congela

Cuando hayas comprado productos de temporada en grandes cantidades en el mercado, en la granja o en el supermercado barato. ¿Qué haces entonces? ¡Los congelas! Corta las verduras en trozos y colócalas en una bolsa o recipiente en el congelador. Lo mismo aplica para las frutas. Ideal para batidos, helados o avena.

También puedes hacer un pan de plátano (con todos esos plátanos maduros), hornear brownies, hacer una deliciosa olla de sopa y un gran curry. Luego congela esto en porciones. Te alegrarás mucho de tenerlo cuando no tengas ganas de cocinar. También puedes preparar jugos o batidos y guardarlos en frascos o botellas de vidrio en el congelador.

Y bueno… Un gran congelador es imprescindible.


4. Manténlo simple

Esto se aplica a varias cosas.

  • Mantén tus recetas simples. No necesitas tener 10 ingredientes en una comida (incluso si lo indica la receta). Asegúrate de tener un buen estante de especias para darle buen sabor a la comida, pero una o dos tipos de vegetales en una comida siguen siendo muy sabrosos.
  • Los ingredientes caros o superalimentos son a menudo extras agradables, pero no siempre necesarios. Y si alguna vez compraste una bolsa de supergreens, algas o nueces, úsala antes de comprar algo nuevo nuevamente. Así no tendrás 10 bolsas o frascos medio llenos en casa y ahorrarás mucho dinero porque muchos de estos superalimentos se pueden usar con moderación.
  • La quinoa es agradable como papilla para el desayuno, pero la avena también puede servir. ¿Necesitas batatas, pero las papas normales son más baratas? Toma esas. Manténlo simple, para ti y para tu billetera.
  • Mantenerlo simple también puede significar; comer menos. Buen consejo de dieta :p No siempre necesitas otro snack extra. Una manzana y una gran taza de té tal vez sean suficientes.


5. Picnic, potluck, comida casera

Para una reunión, cita o encuentro: ¿a comer fuera? Propón que cada uno prepare algo y llévalo al parque. Muy divertido y mucho más barato. ¿No hace buen tiempo? También puedes comer en casa de alguien. Un potluck es realmente estadounidense, pero en realidad es una manera tan agradable de comer rico, saludable y barato. Así no tiene que cocinar una sola persona ni hacer todas las compras, sino que cada uno puede llevar algo delicioso. Hasta puedes disfrutar de una copa extra de vino, porque una botella del supermercado cuesta lo mismo que un vaso en la terraza. Lo mismo ocurre con todas las tazas de té… ¡Oh, y cocinar juntos también puede ser muy divertido (y romántico)!


5. Preparación de comidas, preparación de café

Haz una gran olla de sopa, curry u otra comida simple. ¡Por unos pocos euros tienes algo rico para comer por unos días! Si preparas de antemano los ingredientes y comidas, podrás pasar la semana mucho más barato. Ir al supermercado todos los días te hará comprar «extras». O estarás más inclinado a comprar algo fuera…

Prepárate también batidos y desayunos, como avena overnight. ¿Y cuántas tazas de café compras fuera…? También puedes preparar un termo de café o té para llevar.


7. Compra por unidad, sin empaque

Sin desperdicios, sin plástico. Mejor para el medio ambiente y también mejor para tu billetera. Para esto, ve a supermercados de bajo costo, al mercado o al supermercado turco. También hay supermercados donde puedes medir tú mismo productos secos como frutas secas, nueces, granos, legumbres, arroz, pasta, etc. Muy práctico si necesitas ingredientes que no usas muy a menudo.



8. Come fresco

No las bolsas de vegetales pre-cortados, sino solo 1-2 verduras del mercado. Los alimentos semi-procesados suelen ser los más caros. O los panecillos ya horneados, galletas y comidas preparadas. Te ahorrarás mucho dinero si cortas tus propias verduras, mezclas hierbas y especias, horneas tus propias tortillas o galletas.

>> ¡Haz tu propia leche de avena! Este es realmente el mejor consejo económico. Por un litro de leche vegetal pagas alrededor de 3 euros. El doble de un kilo de avena que te rendirá para hacer unas 10 veces esa cantidad de leche. ¿Cómo hacer leche de avena? Mira el video de la receta aquí.


9. Compra de temporada (y en oferta)

Estos dos a menudo van juntos. Lo que está en oferta suele estar también en temporada. Comer de temporada y productos locales no solo es bueno para nuestra salud y para el medio ambiente, también es bueno para la billetera. Cuando los guisantes no se cultivan completamente en Kenia, las mangas no se tienen que importar de Sudamérica o las fresas no crecen en invernaderos caros, la comida es mucho más barata. Debes disfrutar de la col rizada de origen holandés, manzanas del huerto y moras de las dunas.


10. Recolección, germinación y huertos urbanos

¡Súper económico y también muy divertido! Busca un huerto donde puedas recoger manzanas, peras o ciruelas. Ve a las dunas cuando es temporada de moras y llena tus recipientes. ¿Te sientes realmente aventurero? Busca ortigas y otros tipos de verduras de hoja que no encontramos en el supermercado, pero que son muy saludables. Probablemente esto se pueda hacer ya en un trozo de naturaleza cerca de casa. Asegúrate de informarte sobre lo que es comestible y lo que no, ¡pero esto abre muchas puertas (culinarias)!

Crear tu propia comida requiere algo de energía y tiempo, pero vale la pena. Si deseas desarrollar tu pulgar verde, empieza tu propio jardín. ¡También se puede hacer en el balcón en macetas!

¡Lo más fácil que todos pueden cultivar son los brotes! Los brotes son muy caros si los compras en el supermercado. Son muy saludables y también muy baratos si los cultivas tú mismo. Compra un paquete de semillas de brotes en la tienda biológica y germínalos siguiendo las instrucciones del paquete. En unos días tendrás muchos brotes.

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